Educación e inclusión.

Yo estudié en el Liceo uno. No terminé allí, no tenía el carácter ni el apoyo necesario. Hice los dos últimos años en el Liceo 4, en Matucana. Viví toda mi vida en una población en Renca, en una familia de madre separada y cinco hermanos (siendo yo la mayor). Puedo decir que mi experiencia fue maravillosa. Tanto, que hasta el día de hoy me considero Javierina. Estos colegios te pulen, al punto de que luego en el liceo 4 tuve muy mala relación con la profesora de Inglés, porque sabía demasiado y no estaba dispuesta a esconderlo (tonterías de la juventud). Los colegios emblemáticos sí son colegios de élite, pero de la élite que sirve a la república. No como esos colegios de élite económica, de ricos creciendo entre ricos que luego hacen leyes y experimentan con los hijos de personas que viven en una realidad que jamás conocieron. Son las élites intelectuales, los jóvenes que por talento o por gusto avanzan más rápido que los demás cuando de aprendizaje se trata y que siempre han existido y que siempre existirá porque la genética no entiende de democracia, ni de inclusión, ni de igualdad. La verdad es que no somos todos iguales y yo lo viví en carne propia: tenía la capacidad intelectual, pero mi contexto social no me permitió seguir el ritmo e iba más allá de ser pobre, tenía que ver con la constitución de mi familia y de mi carácter. Cuando llegué al Liceo cuatro para mí era un chiste, un juego de niños.
Ahora, trabajo en un colegio en una comuna conflictiva. No, no como profesora, sino como auxiliar. Tuve a mi hijo en el mismo colegio por un año. Mi hijo me pidió por favor que lo sacara de ahí. Y no tenía que ver con que fuéramos más que ellos: Yo limpio baños para vivir. Tenía que ver con el interés. Mi hijo quería aprender, para él era importante. Mientras sus compañeros (no todos, pero más de la mitad) conversaban, se pintaban las uñas o le tiraban papeles a la profesora. La clase nunca avanzaba, porque el profesor no puede “rajar” a más del 30% de los alumnos por mucho que sea su irresponsabilidad. Lo cambié a un colegio municipal, a la vuelta de la esquina. Un colegio pequeño con muchas carencias, pero no carecía de vocación de los profesores ni de interés de los alumnos. De ahí, y con apoyo de los mismos profesores, que le dieron clases especiales, entró al Instituto Nacional. No porque quiera entrar a la Universidad “más fácil” sino porque el sintió que allí iba a tener lo que nunca antes había tenido: un grupo de personas con un interés real por el aprendizaje. Yo no estaba de acuerdo, me daba miedo que le pasara lo mismo que a mí. Pero lo logró.
Mucho se ha hablado de igualdad, pero se olvidan de algo que sólo cuando trabajas dentro de la educación ves: los colegios tienen miles de formas de apoyar a los niños más débiles, pero hay un factor que ninguna educación va a poder remediar, que es la formación que reciben en los hogares. Un niño que no sabe que el colegio es para estudiar, aprender y desarrollarse jamás le sacará partido a ninguna educación, y esa idea no se forma en el colegio sino mucho antes. Los niños más aventajados, en cambio, están absolutamente abandonados, desde pre-básica, hasta sexto año. Y si fueran ricos no sería problema: los padres podrían contratarles profesores particulares, pagar la entrada del mim, del teatro, del buin zoo y de toda actividad cultural y de aprendizaje cada fin de semana. Pero los que no somos ricos… nuestros hijos se aburren en el colegio irremediablemente, algunos incluso se vuelven rebeldes y violentos, como el pequeño Rodolfo, que este año terminó tercero básico y que no sabe como lidiar con la frustración que le significa terminar las actividades en cinco minutos y quedar desocupado y no poder conversar con el de al lado (porque lo distrae), no poder jugar (porque los distrae) y no poder salir de la sala (porque podría venir un fiscalizador del MINEDUC). O como mi hijo, que no hallaba como aguantar hasta su postulación al Instituto Nacional. La igualdad e inclusión corre hacia los dos lados ¿o no?

-Eso fue un gran discurso autobiográfico.

En realidad este tema de la educación me tienen bien deprimida. Es un desperdicio regalar cupos a cualquier alumno en colegios que son la única opción para chicos talentosos que no tienen plata para pagar colegios caros. Los chicos pobres y talentosos son "el jamón del sandwich": los colegios gratuitos y baratos no les dan las opciones académicas que necesitan, y los colegios de ricos no los reciben. Los emblemáticos eran su única opción, y se las están arrebatando en nombre de la igualdad.

-Así como lo planteas es para llorar...

No te burles. Ya hablaremos otro día.

Falsa modestia.

-Hoy, pregunto yo.

¡Qué miedo! ¿Y para qué, si lo sabes todo?

-Me entretiene hablar con mis hijos, y, especialmente, con los seres humanos. Su retorcida mente es fascinante.

No se si me siento ofendida o halagada...

-Ahi voy. ¿Por qué una mujer occidental, termina adoptando una filosofía china con la que es imposible que tuviera contacto alguno?

Eso es simple: Internet.

-No me refiero a eso, chiquilla. Me refiero a por qué, de todas las opciones de poniente, ninguna te satisfizo, al punto de llevarte a buscar la verdad al otro lado del mundo.

Hmmmm...

-¿Pregunta difícil?

No. No es eso... creo que es por la falsa modestia.

-Me gustó ese concepto. Explícate.

Como bien sabes, yo estudié magia durante bastante tiempo. Según yo, mi interés era puramente el conocimiento, sin embargo, el estudio de la teología me hizo darme cuenta de que era una auto trampa. Yo, al igual que todos, buscaba el poder. Poder sobre el fracaso, sobre el dolor, sobre el abandono, sobre la muerte... sobre el miedo...

-Interesante conclusión.

Entonces pensé: ¿Y por qué tendríamos que tener poder sobre algo? ¿Hicimos nosotros, acaso, el cielo y la tierra? ¿Qué hemos hecho bueno nosotros por los demás seres?
No somos más que una extraña raza de primates.

Soledad y desnudez.

Estoy totalmente deprimida.

-No hay que ser yo para darse cuenta... ¿quë pasó, hijita?

Mira, en realidad, me levanté ligeramente desanimada, y durante el día no mejoré, sino por el contrario.

-Supongo que eso explica por qué me cuentas esto con un chocolate en la boca y otro en la mano.

No te burles. Estuve reflexiva y puse eso en mi estado de facebook, haciendo un recuento de lo que tengo y que hace que no me explique por qué me deprimo ¿y sabes? A mi hombre se le ocurrió hacer un análisis de lo que escribí que me hundió.

-¿Qué fue eso tan grave que te dijo?

Básicamente... que no tengo nada...

-Lo tienes a él.

Es cierto. Pero ya se fue de mi lado una vez.... así que...

-Tú hijo...

Que está creciendo, y se irá a vivir su propia vida...

-Hija, lo seres humanos no tienen nada, en realidad. Nacen solos y desnudos y así mueren. Lo único que queda de ellos es la huella que han dejado en otras personas. Tienen en sus manos (al menos en buena parte) tan sólo el tiempo que viven.

Tengo 30 años, estoy 30 años más cerca de la muerte...

-Esos pensamientos no ayudan. Lo sabes ¿verdad?

Yo creo que por eso soy taoísta. Estoy tan acostumbrada a perder, mi vida ha sido tan inestable, que la única forma de sobrevivir es ser como el agua: adaptable a toda superficie y sin aferrarse a nada. Todo lo que he tenido ha sido siempre temporal, eso es el mundo para mí. Me aferro a mis valores y creencias para enfrentar la pérdida y el miedo que la antecede.

-No seas dura contigo misma, todos los seres humanos tienen un pasado que los precede y determina qué harán y cómo. Estás lidiando con una crisis de fe en tu persona, pero no hay nada mal en eso... Jesús tuvo dudas, también Buda. La duda refleja una virtud: la humildad.

Vacaciones para Dios.

¡Hola!

-Hola, ¿qué tal todo?

Ah, normal... Con ganas de salir de vacaciones.

-¡Uy, vacaciones! Falta me hacen...

¿Cómo te vas a cansar? Eres Dios... todopoderoso y eterno y todo eso...

-Si no me cansara, querría decir que no he hecho suficiente. Pero bueno, ¿no crees que es mucha responsabilidad la que tengo sobre mis hombros?

...

-Todos piden que alguien se sane, que su trabajo mejore, que tal o cual se enamore... eso sin contar los que piden ganar la lotería o el "castigo divino" para sus enemigos.

¿Y cuál es la opción? "Oh, señor, por favor haz que me de cáncer", "por favor haz que quede sin trabajo para poder holgazanear"... XD

-... (suspiro)

Lo siento, fui muy torpe.

-Entiendo a qué te refieres. Pero la felicidad empieza por cada uno, por la forma en que se enfrenta el mundo. No siempre lo que piden es lo que necesitan realmente. Ni siquiera lo que desean es siempre lo que quieren... ¿cómo se puede trabajar así? Es muy difícil conducirlos a la felicidad, porque cada vez se esfuerzan menos por ser felices. Asimismo, es casi imposible hacerles encontrar el amor, pues ya no están dispuestos a amar.

Pero igual es normal que la gente quiera cosas buenas para sí.

-Sí, pero dar a uno, significa quitar a otro. Nadie piensa en eso, en las consecuencias de lo que piden. Mientras todos quieran ser ricos, siempre habrá pobreza en la tierra.

Oye, oye, espera... tú haces todo esto, es tu plan ¿no?

-Sí.

Entonces ya sabes lo que va a pasar, ya sabes que algún día aprenderemos y todo mejorará.

-¿Has visto telenovelas?

Claro, las coreanas la llevan.

-Esto es como cuando en medio de la trama, el malo va ganando. Sabes que al final caerá, pero eso no te impide sufrir la impotencia ante el sufrimiento del, o la, protagonista.

Es lo más humano que te he escuchado. Es raro.

-Jeje... yo conozco todas las emociones, porque en ciertas forma soy todas las emociones. Sufro y gozo en cada una de mis criaturas.

Eso si que es mucho trabajo... Ahora entiendo por qué te vendrían bien las vacaciones.

Feliz año nuevo... y la edad del pavo.

¡Feliz año nuevo!

-... ¿Huh?

Feliz año nuevo...

-¡Ah! Cierto... ustedes celebran cada ciclo de la tierra alrededor del sol... que tengas un buen año.

Eso fue confuso y desabrido.

-Lo siento, esos ciclos tan pequeños me pasan desapercibidos. La medida del tiempo es diferente desde mi perspectiva.

¿Mides el tiempo?

-Más bien lo vigilo. Todo lo que sucede es mi responsabilidad, así que debo observar la evolución de mis criaturas. El tiempo como lo conoces lo han inventado ustedes, como una forma de orientarse. Usan como referencia su sol y/o su luna, pero hay millones de soles y lunas en el universo que rigen días y años de distinta duración. ¿Cómo podría elegir?

Entonces ¿Cómo lo mides tú?

-Como las etapas de vida de una especie.

...

-Los seres vivos siguen un ciclo: Nacen, son infantes, adolescentes, adultos, ancianos y finalmente mueren. Los planetas, las estrellas, las especies y las culturas también lo hacen. No toman un tiempo definido, sin embargo, cada etapa está claramente marcada y es insalvable.

Aaah... ya entiendo. Pero, entonces ¿en cuál de esas etapas estamos los humanos?

-En la adolescencia, evidentemente.

¿Después de miles de años de existencia, recién somos adolescentes? No puede ser...

-Piénsalo. Han pasado de maravillarse con la naturaleza a maravillarse de su propio conocimiento. Han decidido seguir sus propias reglas, aun cuando son más infelices que nunca, porque las mías son muy estrictas. Han adquirido conocimiento sobre el mundo y ahora desechan lo que yo les he enseñado como cuentos de viejos, como si mis enseñanzas no se adaptaran a sus tiempos. Están en rebelión constante contra todo, no quieren asumir consecuencias y sus hormonas los tienen enloquecidos por aparearse...

No, eso no, ahí exageras...

-¿Exagero? Mira los anuncios, las portadas, la calle;  escucha la música que suena en las radios y ve a los "artistas" en televisión. Todo es sobre sexo... Adolescentes en toda regla.

Muy a mi pesar debo estar de acuerdo. Sí somos adolescentes.

-Hay excepciones.

¿Sí?

-Como a veces hay niños más maduros, cuya adolescencia es más centrada, también hay pueblos que han enfrentado la modernidad con más sentido.

Y pensar que yo sólo quería desearte feliz año nuevo...

-Ya te estás quejando, es que nadie te entiende... ¿ves? Estás en la edad del pavo.

Bendita ignorancia.

¡Hola!

-¡Tanto tiempo! ¿qué tal todo?

Ya sabes, navidad, locura, histeria y calor, mucho calor.

-Y enfermedad...

Sí, enfermedad. Medicamentos y restricciones alcohólicas. Al menos tomé vino en nochebuena.

-Ah... vino... ambrosía etílica...

¿Y tú qué sabes?

-Sé que es exquisito. ¿Creías que yo iba a crear cosas y no iba a tener idea?

...

-Soy omnisciente.

Bendita omnisciencia...

-También sé como sabe las baba de caracol, el excremento de paloma y la sangre de un parto. ¿Aun te parece bendita?

Oh. Bendita ignorancia...